El melasma es un trastorno de la pigmentación de la piel, recurrente y se caracteriza por manchas oscuras en zonas expuestas al sol: principalmente pómulos, alrededor de la boca, frente y nariz. Éste afecta principalmente a latinos y asiáticos, al sexo femenino en 95% aunque los hombres no están exentos de padecerlo.

A pesar de que su causa es desconocida, se asocia a factores como: historia familiar, descontroles hormonales propios del embarazo y la menopausia, funcionamiento irregular de la tiroides, acción de los anticonceptivos orales, tratamiento con ciertos fármacos y uso de cosméticos con altas concentraciones de alcohol y colorantes.

Clínicamente, se expresa como una sombra marrón, gris azulada y de bordes irregulares en especial en la frente, nariz, mejillas, porción cutánea del labio superior y región mandibular.

Para su diagnóstico se emplea la lámpara de Wood, que emite una luz ultravioleta para determinar la profundidad de la mancha. Para su tratamiento, se han propuesto una variedad de alternativas terapéuticas con resultados variables y transitorios.

Todos los tratamientos del melasma deben incluir una crema con despigmentantes y antioxidantes, además del indispensable bloqueador solar con filtro químico y físico. También se pueden realizar procedimientos en el consultorio dermatológico como los peelings químicos, microagujas y láser.Los peelings químicos se realizan con diversas preparaciones que incluyen ácido glicólico, ácido retinoico, entre otros. Estos pueden producir inicialmente irritación y luego descamación, con la posterior mejoría de las manchas.

Las microagujas son actualmente utilizadas para introducir medicamentos que pueden ayudar a despigmentar como el ácido tranexámico y antioxidantes como vitamina C y resveratrol.

Las tecnologías basadas en luz, como el láser e IPL, destruyen el pigmento por calor o eliminan  los vasos, mejorando así las manchas. En pacientes venezolanas, de mediana edad, con melasma demostramos que el láser produce una disminución significativa en la intensidad y tamaño de las manchas.

Es muy importante que el paciente recuerde que el principal factor exacerbante es la exposición solar y por ello el protector solar es imprescindible.

Dra. Zulay Rivera
Dermatólogo. Internista.
Caracas.